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<p>Signos Históricos150</p><p>150</p><p>L</p><p>“ORDEN Y JUSTICIA”: EL PARTIDO FASCISTA</p><p>MEXICANO 1922-1923</p><p>Javier MacGregor Campuzano</p><p>Universidad Autónoma Metropolitana-Iztapalapa</p><p>Nor do the Mexicans know exactly what to</p><p>do with the exotic product.</p><p>C. Beals. “The Mexican Fascisti”, octubre de 1923.</p><p>I. Presentación</p><p>a historiografía política mexicana ha ignorado a un actor que, aunque mar-</p><p>ginal, no dejó de tener un impacto importante en los debates y conflictos</p><p>que se generaron durante los turbulentos y abigarrados comienzos de los</p><p>años veinte en nuestro país.</p><p>El Partido Fascista Mexicano, organización creada en 1922, es uno más de los</p><p>cientos y cientos de organizaciones que luchaban por buscar un espacio en el espec-</p><p>tro político de aquellos años, influido notoriamente por una ideología externa y cu-</p><p>yas posibilidades de enraizamiento en nuestro país eran, como ellos mismos lo</p><p>reconocían, escasas.</p><p>Los debates importantes sobre el fascismo y su significación son un fenómeno</p><p>bastante posterior, prácticamente de finales de esa década y de los años treinta. Como</p><p>dice Eric Hobsbawm refiriéndose al contexto de las organizaciones marxistas inter-</p><p>nacionales, “la discusión sobre el fascismo alcanzó en los años treinta sus momentos</p><p>más significativos”.1 El mismo Partido Comunista de México durante casi todos los</p><p>1 Hobsbawm (Dir.), Historia, 1983, p. 21. En un libro más reciente, afirma que “sin el triunfo de Hitler</p><p>en Alemania a comienzos de 1933, el fascismo no hubiera podido convertirse en un movimiento</p><p>general”. Hobsbawm, The Age, 1994, p. 116.</p><p>I.1 (junio 1999), 149-180Signos Históricos</p><p>151“Orden y justicia”: el Partido... Javier MacGregor Campuzano</p><p>años veintes, estará más atento a sus conflictos y tensiones con la socialdemocracia</p><p>y con el laborismo, que con esta organización.</p><p>La importancia del fascismo mexicano, más allá de su exotismo señalado por</p><p>Carleton Beals en el epígrafe de este trabajo, es su aparición temprana en nuestro</p><p>país, su influencia específica en algunas regiones, y su lugar como parte destacada</p><p>en la cadena de organizaciones de derecha que, desde esos años, buscan asentarse en</p><p>México.</p><p>Este trabajo intentará destacar el primero y último de estos aspectos, pues de</p><p>acuerdo a la información que se analiza, se puede vislumbrar una tendencia que va,</p><p>desde la Asociación Católica de Jóvenes Mexicanos, el Partido Fascista Mexicano,</p><p>el Sindicato de Agricultores y la Liga Política Nacional de Angel Flores en 1924, la</p><p>Liga de la Defensa de la Religión Católica y los cristeros. Entre ellos, además, la</p><p>acción de grupos menos comprometidos con la acción directamente política como</p><p>los Caballeros de Colón y la Iglesia Católica.</p><p>Como mencionábamos antes, este tema ha sido poco abordado desde el punto de</p><p>vista historiográfico. Las numerosas obras que cubren el tema de los partidos políti-</p><p>cos durante los años de la “reconstrucción” y de la “institucionalización” (Fuentes</p><p>Díaz, Moreno, Lajous, Garrido, Anlen, Singer y otras), omiten prácticamente cual-</p><p>quier mención del Partido Fascista. Lo mismo sucede con los testimonios y cronolo-</p><p>gías de esos años, tales como los de Taracena, Valadés y Casasola, o con los autores</p><p>que estudian las organizaciones de derecha (H. Campbell, J. Meyer, R. Pérez</p><p>Montfort). Sólo el trabajo presentado en 1938 por Eugene Braderman como tesis de</p><p>doctorado en la Universidad de Illinois, titulado A study of political parties and</p><p>politics in Mexico since 1890, y el libro de Georgette José, El relevo del caudillo,</p><p>publicado en 1982, presentan una sección específica relacionado con la aparición y</p><p>caída del PFM. Por ello, la reconstrucción de la acción de esta organización se reali-</p><p>zará fundamentalmente desde la perspectiva de las fuentes primarias.</p><p>No se presenta en este trabajo una sección amplia de análisis y caracterización</p><p>teórico-conceptual del fascismo, pues lo que se presenta en el caso mexicano, fuera</p><p>del nombre —y sus documentos fundamentales lo muestran— son paralelismos leja-</p><p>nos con el caso europeo. Los estudios de Nicos Poulantzas, Ernest Nolte, Barrington</p><p>Moore, Woolf, Francis Carsten, Norberto Bobbio y otros, las caracterizaciones del</p><p>fascismo como un “estado de excepción”, el carácter de la “revolución fascista” y</p><p>demás, las hemos suplido por el análisis que realiza Eric Hobsbawm del breve siglo</p><p>XX, en su sección sobre la caída del liberalismo. La acción específica del fascismo</p><p>Signos Históricos152</p><p>europeo y sus características distintivas, nos ayudarán a orientarnos en algunas de</p><p>las características de su contraparte mexicana, aunque como era claro desde 1923,</p><p>este es un paralelismo que no se puede llevar muy lejos.</p><p>II. El Partido Fascista Mexicano</p><p>Quizás el análisis global más útil sobre la acción y significación del Partido Fascista</p><p>tal como se desarrolló en nuestro país, es el que escribió Carleton Beals2 en un artí-</p><p>culo publicado en el mes de octubre de 1923 en la revista Current History, titulado</p><p>precisamente, “The Mexican Fascisti”. Realizaremos un análisis detallado de este</p><p>artículo, después de exponer algunos datos generales.</p><p>a) Organización</p><p>Tan sólo un mes después de la marcha en octubre de 1922 de los cincuenta mil</p><p>camisas negras de Mussolini sobre Roma, el movimiento fascista en México, origi-</p><p>nado en Jalapa, publica en la ciudad de México su programa, “negando que sea</p><p>reaccionario o defensor de intereses creados que no tengan relación con la justicia”.3</p><p>Su creador, Gustavo Sáenz de Sicilia, anuncia en febrero de 1923 una membresía de</p><p>100 000 participantes, y alardea sobre la posibilidad de juntar en seis meses más un</p><p>millón.4 En un principio, es una organización que progresó rápidamente, “por lo que</p><p>algunos la vieron como un factor político que había que tener en cuenta”.5 Los datos,</p><p>como veremos más adelante, exageraban la presencia real de esta organización, pero</p><p>sus avances no eran del todo nimios. Por ejemplo, ese mismo mes de febrero</p><p>Sicilia declaró que los integrantes de la comisión organizadora de su partido habían au-</p><p>mentado de 25 a 35; existían 420 agencias en toda la república, 36 agentes recorrían el</p><p>2 Carleton Beals fue uno de los slackers que vinieron a nuestro país huyendo del reclutamiento, a raíz</p><p>del ingreso de los E.U. en la Primera Guerra Mundial a mediados de 1917: “fue un jóven periodista</p><p>nacido en 1893 en Medicine Lodge, Kansas, que se había graduado en 1916 en Artes en California, y</p><p>que llegó a México en 1918, vía Cd. Juárez”. Taibo, Los Bolshevikis, 1986, p. 25.</p><p>3 Current History, vol. XVII, january 1923, p. 707. Véase, además , José V., El relevo, 1982, p. 62.</p><p>4 Current History, vol. XVII, february 1923, p. 877.</p><p>5 Braderman, A Study, 1938, p. 212.</p><p>153“Orden y justicia”: el Partido... Javier MacGregor Campuzano</p><p>país, haciendo propaganda y había siete periódicos locales voceros del fascismo, también</p><p>anunció que próximamente saldría a la luz un periódico de alcances nacionales.6</p><p>Un reporte dirigido al Departamento de Estado norteamericano transcribe una</p><p>relación de más de 400 “Agentes del movimiento fascista en los E.U. y México” (ver</p><p>anexo), que describe personas y lugares de varios estados de la República, principal-</p><p>mente Veracruz,7 y una nota de marzo de 1923 de la revista Current History que</p><p>informaba que “agentes viajeros fueron enviados a todas partes de la República para</p><p>repartir propaganda en contra de las leyes agrarias, tanto como contra el socialismo</p><p>y el comunismo”,8 parecen comprobar la caracterización anterior.</p><p>La rapidez con la que la organización se extinguió no parece avalar o justificar</p><p>una presencia numérica tan fuerte:</p><p>Partido Fascista: Organizado en enero de 1923 [sic], encabezado por el Sr. Gustavo Saenz</p><p>de Sicilia. El Sr. Guillermo Pous fue hecho cabeza del partido en abril de 1923. Un can-</p><p>didato presidencial que se rumoró del partido fue el Sr. Manuel Calero, pero el partido</p><p>tuvo muy corta vida, disolviéndose alrededor de mediados de 1923, cerca de un año antes</p><p>de la elección presidencial.9</p><p>Análisis que coincide en parte con el realizado por Braderman:</p><p>Pero el fascismo en México careció</p><p>de un programa social significativo con el cual poder</p><p>llamar a la clase media a la militancia. Apoyado por los seniles, políticamente impotentes</p><p>adherentes de los regímenes de Díaz y Huerta, no tuvo ni siquiera el apoyo concertado de</p><p>las clases conservadoras, y temporalmente salió de la escena política.10</p><p>En todo caso, si los datos del attaché militar norteamericano son ciertos, existe</p><p>una liga entre el Partido Fascista y la Liga Política Nacional, que apoyara la candida-</p><p>6 José V., El relevo, 1982, p. 66, sobre la base de información publicada en Omega, el 10 febrero,</p><p>1923.</p><p>7 NAW/Department of State/Roll 92 812 00, Fascist movement. “Agentes del movimiento fascista en</p><p>los E.U. y México”, s.l., s.f.</p><p>8 Current History, vol. XVII, March 1923, p. 1065.</p><p>9 U.S. Military Intelligence Reports: México, 1919-1941. Reel I, 0549, G-2. Subject 3700, No. 177,</p><p>Political Parties. Mexico, April 23, 1925, pp. 3-4.</p><p>10 Braderman, A Study, 1938, pp. 212-213.</p><p>Signos Históricos154</p><p>tura de Angel Flores a la presidencia de la República en contra de la candidatura de</p><p>Plutarco Elías Calles. Guillermo Pous es uno de los firmantes del acta constitutiva</p><p>de la Liga Política Nacional con, entre otros, René Capistrán Garza y Manuel Palo-</p><p>mar y Viscarra (destacados militantes de la ACJM, primero, y de la LNDR después,</p><p>de presencia muy activa en el conflicto cristero). La candidatura de Flores está pro-</p><p>puesta inicialmente con el Sindicato Nacional de Agricultores, del cual el mismo</p><p>Pous fue durante algún tiempo director de organización.11</p><p>Quizás es esta misma incorporación a un movimiento político mayor el que ex-</p><p>plique el rápido declive del movimiento fascista en México (aún cuando Sáenz de</p><p>Sicilia no aparece entre los firmantes de la LPN). Volveremos a ello.</p><p>b) Programa y Principios</p><p>Contra lo que afirman algunos autores, el Partido Fascista Mexicano sí desarrolló</p><p>una serie de planteamientos que, aunque generales, servían para orientar su acción.</p><p>Particularmente, analizaremos un “Manifiesto del Partido Fascista Mexicano a la</p><p>Nación”, fechado en la ciudad de México en diciembre de 1922, y los “Principios</p><p>fundamentales del Fascismo Nacional Mexicano” fechados en México el 3 de abril</p><p>de 1923.12</p><p>Retomando el estudio de Eric Hobsbawm y su caracterización del fascismo, men-</p><p>ciona que</p><p>el cemento común de estos movimientos [de derecha radical no tradicional] era el resen-</p><p>timiento de los pequeños hombres en una sociedad que los aplastaba entre la roca de los</p><p>grandes negocios por un lado y el difícil lugar de los ascendientes movimientos de las</p><p>masas trabajadoras por el otro.13</p><p>11 U.S. Military Intelligence Reports: Mexico, 1919-1941. Reel I, 0549, G-2. Subject 3700, No. 177,</p><p>Political Parties. México, April 23, 1925, p. 3. La Iglesia católica se quizó deslindar de estos movi-</p><p>mientos políticos: “Reportes de que el movimiento fascista estaba apoyado por la organización de la</p><p>Iglesia católica con miras de eliminar a las clases trabajadoras y a los granjeros de la política mexicana</p><p>y dominar la próxima elección presidencial, fueron oficialmente negadas por el arzobipo de México el</p><p>25 de diciembre”. Current History, 877, XVII, 1923.</p><p>12 Ambos documentos se encuentran reproducidos en los microfilmes de los NAW/Department of</p><p>State/Rollo 92 812 00. Fascist movement. En adelante, nos referiremos a ellos como Manifiesto ... y</p><p>Principios ...</p><p>13 Hobsbawm, The Age, 1994, p. 119.</p><p>155“Orden y justicia”: el Partido... Javier MacGregor Campuzano</p><p>Los fascistas mexicanos hubieran acogido con gusto esta caracterización, pues</p><p>en el Manifiesto de diciembre de 1922, afirmaban que</p><p>El fascismo mexicano ha sido constituido para velar por la aplicación de la ley en benefi-</p><p>cio universal, porque no es atributo exclusivo de elementos privilegiados. El capital, el</p><p>trabajo libre o sindicalizado, la clase media, víctima muchas veces de la pugna entre</p><p>aquellos dos grandes factores, los profesionistas, los empleados, los particulares, todos</p><p>tienen derecho, y a todos incumben obligaciones que deben respetar para que se conserve</p><p>el equilibrio social.</p><p>En otras palabras, los fascistas se opondrían enérgicamente “a la tiranía del capi-</p><p>tal sobre el trabajo como del trabajo sobre el capital”.14</p><p>Sin ninguna declaración antisemita de por medio (Hobsbawm no considera el</p><p>antisemitismo como un rasgo central de los movimientos fascistas iniciales), sí em-</p><p>prendió una vigorosa campaña orientada a combatir el bolchevismo en cualquiera de</p><p>sus manifestaciones. Las primeras líneas del Manifiesto de 1922 advierten en contra</p><p>del crecimiento del fenómeno bolchevique y su artificial introducción a nuestro país</p><p>desde Rusia. El caos en que se encuentra sumido el país se explica por el incremento</p><p>que en él ha tomado el bolchevismo, y la misión del fascismo es precisamente sal-</p><p>varlo de dicho caos.</p><p>Si “la diferencia principal entre los fascistas y la derecha no fascista era que el</p><p>fascismo existía movilizando a las masas desde abajo”,15 en México éste difícilmen-</p><p>te podía ser un atributo propio de otro grupo que el revolucionario, y en ese sentido</p><p>su crítica era transparente:</p><p>No queremos manifestar que hemos de ser enemigos de los trabajadores sindicalizados,</p><p>ni que trataremos de echar por tierra las ventajas legítimas que hayan adquirido los gre-</p><p>mios, pero manifestamos sin lugar a dudas, que cuando traten cualesquier elementos de la</p><p>sociedad de sobreponerse indebidamente a los demás, de imponerles una injustificada</p><p>dictadura, de medrar a costa de los otros, estaremos siempre dispuestos a combatir con</p><p>toda energía semejantes abusos.16</p><p>14 Principios..., 3 abril, 1923, p. 2.</p><p>15 Hobsbawm, The Age, 1994, p. 117.</p><p>16 Manifiesto..., diciembre 1922, cursivas mías.</p><p>Signos Históricos156</p><p>Las prerrogativas propias de los líderes sindicales —estrechamente aliados con</p><p>el gobierno de Obregón con quien, no está de más recordar, habían firmado un pacto</p><p>en agosto de 1919, en plena campaña electoral— no las negociarían con ninguna</p><p>fuerza de cualquier tendencia, menos aún con un grupo pequeño, desconocido y de</p><p>ideología indefinida. Los líderes políticos y sindicales del país, desde los más cerca-</p><p>nos a las posiciones del gobierno, como aquellos identificados con los comunistas,</p><p>anarcosindicalistas o independientes, no verán amenazados sus controles sociales</p><p>por el fascismo en ningún momento.</p><p>Por lo que el propio planteamiento fascista indica, el apoyo que se busca se orien-</p><p>ta más hacia las capas medias, universitarios o profesionistas. De los campesinos, ni</p><p>hablar: prácticamente son omitidos de las propuestas contenidas en el Manifiesto y</p><p>en los “Principios”, excepto cuando se refieren en estos últimos de manera vaga al</p><p>problema agrario</p><p>... que se protejan las tierras cultivadas, dando a sus propietarios todo género de garan-</p><p>tías. Para las demás y con objeto de formar la pequeña propiedad se procura que los</p><p>agricultores obreros adquieran a precios equitativos y a plazos razonables, las parcelas</p><p>que puedan cultivar.17</p><p>Ciertamente, no era en este sector social donde iban a encontrar su principal base</p><p>de sustento político o popular.</p><p>Quizás donde mayor coherencia y sustento encuentran las propuestas del Partido</p><p>Fascista, está en el terreno político. Muy a tono con la distancia que muchas organi-</p><p>zaciones de la época marcaban hacia la política (“no quiere esto decir que vayamos</p><p>a emprender una obra meramente política”), los fascistas mexicanos claman por la</p><p>aplicación de los principios del sufragio efectivo y la no reelección, “pero exten-</p><p>diéndolos a todos los cargos de elección popular”:18</p><p>Queremos que los derechos políticos sean algo efectivo y no sigan siendo como hasta hoy</p><p>vulnerados por todos los partidos cuya funesta actuación ha dado por resultado el más</p><p>profundo escepticismo en la eficacia del voto popular.19</p><p>17 Principios..., 3 abril, 1923, p. 2. No en balde se asocia a esta organización con el Sindicato Nacional</p><p>de Agricultores, el cual era “una asociación de protección y partido político, compuesto de propieta-</p><p>rios de tierra y granjeros, organizado con el propósito de</p><p>proteger las propiedades productivas en</p><p>contra de la aplicación arbitraria de las leyes agrarias”. U.S. Military Intelligence Reports: México,</p><p>1919-1941. Reel I, 0549, G-2. Subject 3700, No. 177, Political Parties. Mexico, April 23, 1925.</p><p>18 Principios..., 3 abril, 1923, p. 1.</p><p>19 Manifiesto..., diciembre 1922, p. 3.</p><p>157“Orden y justicia”: el Partido... Javier MacGregor Campuzano</p><p>Ligados a lo anterior, se encuentran otros puntos que redondean su programa:</p><p>libertad de prensa, libertad de cultos, libertad de la industria, libertad del trabajo,</p><p>respeto a la dignidad militar, moralidad administrativa (que los gobernantes rindan</p><p>cuentas), eficacia de la educación pública, así como la protección del desarrollo de</p><p>la explotación de la riqueza nacional. No son partidarios de violencia, pero “apelare-</p><p>mos también a ella para oponerla a la que se esgrima en contra de nuestros ideales y</p><p>los postulados que proclamamos”.20 No es una propuesta militarizada, como lo eran</p><p>la mayoría de las provenientes de la derecha radical no tradicional del mundo, ni</p><p>como se conformarían las propuestas más radicales de este segmento en nuestro país</p><p>años más tarde.</p><p>c) Análisis del fascismo mexicano</p><p>Como hemos mencionado, el análisis más completo de este fenómeno político lo</p><p>realizó Carleton Beals, tanto en su artículo de octubre de 1923, como en un libro</p><p>publicado ese mismo año: Mexico An Interpretation.21</p><p>Comencemos con esta última obra, la cual citaremos in extenso:</p><p>Estos desarrollos han sido seguidos por la fundación de un movimiento fascista. Los</p><p>locales fascistas fueron organizados primero en Jalapa en 1922, y subsecuentemente otros</p><p>grupos se expandieron hacia la ciudad de México, Tampico, Guadalajara y otros lugares.</p><p>Ninguna organización nacional ha sido afectada, aunque su principal líder, el “Gallo”</p><p>Saenz de Sicilia de la Ciudad de México, quien publica el órgano El Fascista, me informó</p><p>que en el país entero, a finales de abril de 1923 había 150,000 fascisti organizados. En</p><p>Tampico el grupo ha sido acusado de estar pagado por los países petroleros, en otros</p><p>lugares a pago de los terratenientes desposeídos. Los hacendados, organizados en el Sin-</p><p>dicato de Agricultores para una ofensiva en contra de la reforma agraria del gobierno, se</p><p>han unido definitivamente en la mayoría de las localidades con los fascistas.</p><p>Uno de los aspectos más discutidos es el de su relación con la Iglesia católica:</p><p>Están cercanamente conectados con la Iglesia católica, mientras que en Italia el movi-</p><p>miento fue anti-católico. Muchos de los miembros del movimiento mexicano son sacer-</p><p>20 Manifiesto..., diciembre 1922, p. 4.</p><p>21 Curiosamente, en su libro más conocido, Glass Houses. Ten Years of Free-Lancing, que abarca</p><p>también estos años, y en el cual Beals hace un recuento detallado del fascismo italiano, no se encuen-</p><p>tran referencias a esta organización mexicana.</p><p>Signos Históricos158</p><p>dotes católicos; y se ha acusado que la iglesia tiene un fondo de cinco millones de pesos</p><p>que espera usar, durante las elecciones de 1924, en canales fascistas. El 26 de junio,</p><p>cuarenta generales de la Revolución se unieron para combatir el fascismo. La C.R.O.M.</p><p>ha tenido frecuentes reuniones para denunciar a los fascistas y ha publicado manifiestos</p><p>llamando al movimiento como el pivote de las fuerzas reaccionarias y católicas del país,</p><p>deseosas de destruir al trabajo organizado y los beneficios de la Revolución.22</p><p>Posterior a la publicación de este libro es el artículo “The Mexican Fascisti”,23 en</p><p>donde el panorama se ha ampliado, y las limitaciones de este partido son más claras</p><p>y definitivas.</p><p>Comparando el mexicano con el italiano (éste, como producto del nacionalismo,</p><p>sindicalismo y arditismo), y desarrollando el paralelo entre los elementos constituti-</p><p>vos de ambos (además de los anteriores, la relación con la iglesia, el ejército, la</p><p>educación, los partidos políticos, los propietarios de la tierra, etc.), ratifica su estu-</p><p>dio anterior en el que localizaba una clara interacción en México entre fascismo e</p><p>iglesia, y fascismo y terratenientes, y termina preguntándose cuál es entonces, en</p><p>vista de condiciones tan dispares a las italianas, el ánimo de esta “trastornada” (topsy-</p><p>turvy) edición de la mítica Guardia Negra de Mussolini. Responde:</p><p>El fascismo en México es realmente un movimiento diletante y ha sido, de hecho, llama-</p><p>do un movimiento ‘fifi’. Carece de un programa social significativo, reaccionario o de</p><p>otro tipo, distinto de aquél del gobierno o de otras organizaciones existentes. No puede</p><p>llamar a la clase media a la militancia. Carece incluso de un respaldo concertado de</p><p>fuerzas conservadoras. Si se apoya en los intereses industriales americanos sería inmedia-</p><p>tamente desacreditado a los ojos de los mexicanos. Por el otro lado, los beneficiarios del</p><p>difunto régimen de Díaz son escasos, seniles, o completamente destruidos —incapaces</p><p>de dotar al fascismo de ningún estímulo efectivo. Diez años de Revolución han atestigua-</p><p>do la expansión de la clase media y han conducido hacia la fibra social a una cuña de</p><p>nuevos ricos que son más o menos el efecto de la revolución, promoviéndola y benefi-</p><p>ciándose de ella, aunque más o menos imbuidos, sin embargo, con los ideales emancipa-</p><p>dores, democráticos, burgueses, que se han desarrollado durante los últimos diez años.</p><p>Los advenedizos son incapaces, por razones egoístas y debido a convicciones honestas,</p><p>de ver un regreso al anterior sistema semi-feudal. Los fascistas, como sea, están hechos,</p><p>22 Beals, Mexico, 1923, pp. 141-142. Las cursivas y el subrayado, en español en el original.</p><p>23 Current History, Vol. XIX, october 1923, pp. 257-261,</p><p>159“Orden y justicia”: el Partido... Javier MacGregor Campuzano</p><p>en buena parte, de los holgazanes decadentes de la última desvanecida generación de la</p><p>autollamada aristocracia porfirista junto con unas pocas personalidades vivas persisten-</p><p>tes de la época de Huerta.24</p><p>Como veremos en el inciso siguiente, esa caracterización por más exagerada que</p><p>se nos antoje, no deja de tener un correspondiente político muy preciso, siendo la</p><p>“más alta tribuna” de la nación desde la que se expone: la Cámara de Diputados.</p><p>III. Debate sobre el Fascismo en México</p><p>Un indicador útil para valorar la significancia e influencia de la acción de los fascis-</p><p>tas en nuestro país, nos lo presenta la forma en que ésta fue abordada en la Cámara</p><p>de Diputados, a través de la intervención de diversos legisladores.</p><p>Si es sorprendente lo temprano de la aparición del movimiento fascista en nues-</p><p>tro país (noviembre de 1922), no lo es menos la velocidad con que las condenas al</p><p>mismo se expresaron en los debates parlamentarios: ese mismo mes ya se comienzan</p><p>a vertir críticas y llamados de alerta en contra de eso que, en realidad, nadie puede</p><p>definir con mucha claridad.</p><p>Los principales debates en los que se realizan alusiones a este movimiento, son</p><p>los realizados el 29 de noviembre, y el 7 y 19 de diciembre de 1922, así como el del</p><p>8 de mayo de 1923. Los nombres de los diputados participantes no son menores:</p><p>Manlio Fabio Altamirano, el Dip. Gandarilla, José Manuel Puig Casauranc y Anto-</p><p>nio Díaz Soto y Gama, entre otros.</p><p>El Diario de los Debates, correspondiente a los primeros meses de lo que, por</p><p>otras razones, será una de las legislaturas más importantes de esos años, la XXX,</p><p>consigna en su sesión del 29 de noviembre de 1922, el llamado que el diputado por el</p><p>6o. distrito del estado de Veracruz, Manlio Fabio Altamirano, realiza en contra de</p><p>Donato Moreno, gobernador de Zacatecas, estado que “tan grandes revolucionarios,</p><p>que tan esforzados paladines dentro de la lucha armada ha sabido producir”, pues se</p><p>ha constituido en un líder del “fascismo”.25 Reconoce la desgracia de que haya sido</p><p>en Veracruz, más específicamente en Jalapa, que haya surgido esta tendencia, y ad-</p><p>24 Current History, vol. XIX, October 1923, p. 261.</p><p>25 Diario de los Debates, 29 noviembre,1922.</p><p>Signos Históricos160</p><p>vierte que el fascismo es la bandera de la reacción mexicana en México. La Revolu-</p><p>ción, que no se ha bajado</p><p>del caballo según Altamirano, está alerta en contra de sus</p><p>enemigos, y éstos no podrán tomar desprevenido al proletariado de la república:</p><p>... agrupémonos alrededor de la bandera revolucionaria y frente a la bandera “fascisti”,</p><p>bandera negra desde hoy, bandera debajo de la cual se esconde el clero, bandera debajo</p><p>de la cual están todos los conservadores y todo el militarismo enemigo de la Revolución,</p><p>bandera debajo de la cual está toda la prensa pagada por toda la burguesía: ¡frente a esa</p><p>bandera negra desde hoy levantemos la bandera de la revolución!26</p><p>Al llamado de alerta, sigue una descalificación plena en cuanto a las posibilida-</p><p>des reales de la nueva organización que se dibuja en el horizonte político. En el seno</p><p>de una discusión sobre el Artículo 108 constitucional, el diputado cooperatista por el</p><p>5o. distrito de Durango, Emilio Gandarilla, previene:</p><p>Ya sabéis que en estos momentos una agrupación verdaderamente reaccionaria se inicia</p><p>en nuestro país y aunque aquí en la capital de la República la iniciación ha sido ridícula,</p><p>ha sido una bufonada, ha sido una superchería, con el nombre de “Fascismo metropolita-</p><p>no”, detrás de los bufones, detrás de los malandrines se encuentran los verdaderos agita-</p><p>dores, los eternos enemigos de la revolución: la reacción, el clero y el capitalismo.27</p><p>Hace una rotunda descalificación del autodenominado “jefe del fascismo metro-</p><p>politano”, Sáenz de Sicilia, a quien no bajan de felicista, huertista, ex secretario de</p><p>Braniff, y quien, según se rumora, pedirá cuentas en la Cámara de Representantes.</p><p>Esto dio a pie a un ejercicio de pirotecnia verbal:</p><p>Y aquí vendrán estos “ciudadanos fascisti” porque ignoran evidentemente, porque no han</p><p>venido un sólo día a estas sesiones, porque ignoran que aquí hay representantes de la</p><p>revolución que, llámense cooperatistas, llámense agraristas, llámense peleceanos, llámense</p><p>socialistas, siempre tendrán una bandera, la bandera roja de las reivindicaciones del pue-</p><p>blo, la bandera de la lucha de clases (Aplausos nutridos).28</p><p>26 Diario de los Debates, 29 noviembre, 1922.</p><p>27 Diario de los Debates, 7 diciembre, 1922.</p><p>28 Diario de los Debates, 7 diciembre, 1922.</p><p>161“Orden y justicia”: el Partido... Javier MacGregor Campuzano</p><p>Este bloque de fuerzas, aparentemente homogéneo en contra del enemigo común</p><p>se deshará un poco más adelante, y terminará en las jornadas parlamentarias ya co-</p><p>nocidas que precedieron a la rebelión delahuertista.</p><p>Otro diputado cooperatista, José Manuel Puig Casauranc, quien pocos meses des-</p><p>pués se unió al bando callista en contra de sus antiguos compañeros de partido, y fue</p><p>además ministro en el gabinete de Calles, hizo una de las caracterizaciones más</p><p>precisas de la presencia del movimiento fascista en México. Lamentando, al igual</p><p>que Altamirano, que el estado del cual él era representante, Veracruz, fuera en el que</p><p>este movimiento surgió, lamenta doblemente el que en su distrito electoral, en Santa</p><p>Lucrecia, se haya sustituido un auténtico Partido Rojo por una organización fascista</p><p>(en realidad, crearon un comité dependiente del centro de Jalapa, constituyendo un</p><p>“blok fuerte en este municipio; más fuerte aún que el partido rojo”). Al respecto,</p><p>manifiesta:</p><p>Los señores diputados no ignoran hasta qué punto es ridículo y necio establecer un parti-</p><p>do “fascisti” en la República, los señores diputados saben que en Italia la organización</p><p>“fascisti” es, simplemente, una organización militar que constituye los restos, los resi-</p><p>duos de los soldados licenciados después de la guerra mundial.29</p><p>Esta forma de ubicar el surgimiento del fenómeno, explica la forma en que estos</p><p>grupos de tres o cuatrocientos mil soldados, logran constituirse en un grupo podero-</p><p>so, de naturaleza militar, “que pudo apoderarse del gobierno de Italia”. Después de</p><p>prevenir que lo mismo podría pasar con los Estados Unidos, sugiere que</p><p>pensar que en México se pueda organizar un partido “fascisti” que se oponga al verdade-</p><p>ro progreso de las ideas sociales y políticas que favorecen al proletariado; que pueda</p><p>organizarse un partido “fascisti”, con los elementos más desprestigiados y más débiles y</p><p>más manchados de la clase media, es sencillamente, ridículo ...30</p><p>Finalmente, a mediados de 1923, en medio de una discusión sobre el desarme de</p><p>los campesinos, Antonio Díaz Soto y Gama, líder del Partido Nacional Agrarista, y</p><p>uno de los dirigentes obregonistas más sobresalientes, observa la división que el</p><p>fascismo está tratando de realizar entre los elementos revolucionarios. Retomando</p><p>29 Diario de los Debates,19 diciembre, 1922. Este es otro de los elementos importantes que Hobsbawm</p><p>utiliza para su caracterización del fascismo temprano.</p><p>30 Diario de los Debates, 19 diciembre, 1922.</p><p>Signos Históricos162</p><p>una noticia reciente del diario Excélsior, informa de la asociación que se está dando</p><p>entre el fascismo y el Sindicato de Agricultores, cuyo director “será el jefe de los</p><p>fascistas mexicanos”. En una alusión que parece más bien dirigida a otra parte —el</p><p>debate con los cooperatistas acerca de la sucesión se está comenzando a calentar—,</p><p>Soto y Gama define la táctica en la que basará su acción el fascismo mexicano como</p><p>de trastorno del orden legal mexicano:</p><p>La situación de los reaccionarios es opuesta frente a nuestro agrarismo legal, a nuestro</p><p>agrarismo basado en la ley, encarrilado dentro de la ley constitucional; la actitud de los</p><p>reaccionarios es muy otra: los reaccionarios son ahora los deseosos de un movimiento</p><p>armado, los reaccionarios desean el desorden, los reaccionarios desean la contrarrevolu-</p><p>ción; ¿por qué? porque el orden legal no les satisface, y la única esperanza que tienen es</p><p>destruir este orden legal.31</p><p>En esa misma sesión, Manlio Fabio Altamirano retoma el tema y enumera a los</p><p>que considera los enemigos de la Revolución: el fascismo (“que se organizó, que co-</p><p>mienza a organizarse en la República Mexicana; el fascismo, que es el partido de los</p><p>Caballeros de Colón, convertidos en partido político con el nombre de fascismo para</p><p>entrar en la lucha electoral”), el clericalismo (que proporciona al fascismo el dinero</p><p>y todo lo necesario para la lucha política) y el militarismo. Estos elementos, según</p><p>Altamirano, junto con la burguesía imperante, están tratando de crear el frente único</p><p>contra la Revolución, al que hay que frenar, y no permitir armarse de ninguna forma.</p><p>En octubre de ese año, se cierra el círculo de estas caracterizaciones. La rectificación</p><p>del programa de la revolución que, según Soto y Gama, propone De la Huerta como</p><p>candidato de los cooperatistas, le huele a fascismo. Yendo todavía más allá, dice:</p><p>Entre el “fascismo” de Mussolini en Italia y el “cooperatismo” de De la Huerta en Méxi-</p><p>co, hay todavía otro punto de contacto: la formación de ‘bandas’ —aquí se llaman ‘porras’—</p><p>, que con lujo de violencia han querido imponerse por el miedo, la intimidación o por la</p><p>violencia a los hombres fuertes o débiles de la revolución, con una sola diferencia: que</p><p>los casos son inversos. En Italia la reacción, desgraciadamente, por un momento fue más</p><p>fuerte que la revolución; y aquí en México es lo contrario: la revolución es inmensamente,</p><p>enormemente más fuerte que la reacción.32</p><p>31 Diario de los Debates, 8 mayo, 1923.</p><p>32 Diario de los Debates, 29 octubre, 1923.</p><p>163“Orden y justicia”: el Partido... Javier MacGregor Campuzano</p><p>La rebelión estalla en diciembre de ese año y, como sabemos, pese a la persona-</p><p>lidad de algunos de sus participantes más avanzados (Alvarado, Múgica, el mismo</p><p>De la Huerta) será tildada, en buena medida, de una intentona “reaccionaria”. Las</p><p>siguientes alusiones al fascismo en el Congreso, se realizarán prácticamente hasta</p><p>finales de esa misma década, cuando la amenaza internacional de un avance fascista</p><p>cobra una forma mayor.</p><p>Paradójicamente, una de las críticas más difundidas por un miembro de la “fami-</p><p>lia revolucionaria” en contra del fascismo, las había realizado Adolfo de la Huerta,</p><p>todavía como ministro de Hacienda de Alvaro Obregón: “el público no se suicidará,</p><p>y nuestro pueblo, el cual</p><p>está en proceso de perfeccionarse social y económicamen-</p><p>te, a través de los medios de la ley y el orden, no aceptará ningún principio que se</p><p>oponga a sus intereses, contrario a su inteligencia”, continuando con la sentencia de</p><p>que el fascismo en México será un “ruidoso fiasco”, pues la gente no aceptará movi-</p><p>mientos contrarios a sus derechos y a sus ideales.33</p><p>IV. Consideraciones finales</p><p>El estudio del Partido Fascista Mexicano durante el período comprendido entre los</p><p>años de 1922 y 1923, nos muestra algunas de las particularidades del debate y la</p><p>cultura política de aquellos años.</p><p>La Revolución mexicana creó una clase política que se suponía inmune a cual-</p><p>quier influencia política teórica o práctica que se considerara reñida con lo que se</p><p>suponía eran los principios básicos de la propia Revolución. Esta premisa se aplicó</p><p>indistintamente tanto a fascistas como a comunistas, con la salvedad de que estos</p><p>últimos sí lograrían crear una organización mucho más duradera y acorde con ciertos</p><p>requerimientos de las clases laborantes. Los fascistas no encontraron caldo de culti-</p><p>vo alguno que permitiera desarrollar en nuestro país ninguno de los principios por lo</p><p>que supuestamente abogaban. No parecen haber estado registrados como organiza-</p><p>ción formal, y de esta forma poder participar en los procesos electorales, por cuya</p><p>transparencia exclamaban. No desarrollaron un trabajo cercano a ningún organismo</p><p>social o político, que les permitiera ampliar el rango de su influencia. No recibieron</p><p>33 NAW/Department of State/ Rollo 92, 812.00. Fascist movement. “Opinions of Mr. De la Huerta</p><p>regarding the fascisti in Mexico”, México, december 25, 1922. Carlos J. Morales. Partes de estas</p><p>opiniones las reproduce Beals en su artículo de Current History.</p><p>Signos Históricos164</p><p>ni otorgaron demasiada importancia de aquellos a quienes, de alguna manera, po-</p><p>drían caracterizarse como sus adversarios naturales: los comunistas.34</p><p>Los violentos ataques al bolchevismo son demasiado genéricos, y parecen mez-</p><p>clar una crítica al “programa social” de la Revolución, a la organización de los obre-</p><p>ros y los campesinos, y algunas medidas anticlericales que la propia Constitución</p><p>establecía. Quizás, tal como hemos visto, una perspectiva más precisa de la acción</p><p>de este grupo, debe ubicarse en su conexión con organizaciones que intentaban pre-</p><p>sentar un frente común al proyecto del grupo sonorense; un frente común que no</p><p>podía ser demasiado amplio o abierto, pues la participación de las masas estaba</p><p>prácticamente ganada de antemano. Estos grupos —Iglesia, grandes propietarios,</p><p>políticos del antiguo régimen— podían haber tenido interés en participar de nuevo</p><p>políticamente. El hecho de que se mencione a personajes como Nemesio García</p><p>Naranjo, Manuel Calero, Elguero, Manuel Pous y otros como cercanos a las posicio-</p><p>nes del fascismo mexicano —un estudio más amplio sobre estas bases sociales o</p><p>políticas requerirían de otro tipo de fuente de la que ahora carecemos35 —, intenta,</p><p>quizás, desacreditarlo de antemano, pero puede tener también que ver con un pro-</p><p>yecto real, no plenamente articulado o estructurado, pero existente y puesto en prác-</p><p>tica. Ese era el énfasis de sus críticos contemporáneos.</p><p>34 En 1924, el senador comunista Luis G. Monzón, consideraba que “en cuanto a que las doctrinas</p><p>fachistas figuran en los programas de Herrot, Mac Donald y Elías Calles, estos ciudadanos, aún cuan-</p><p>do están unidos al laborismo amarillo, sabrán rechazar tan bochornosas apreciaciones”. Monzón ,</p><p>Algunos puntos, 1924, p. 10.</p><p>35 Además de la relación que sirve de anexo a este artículo, y sobre cuyo contenido no tenemos más</p><p>información, conocemos la integración de la Comisión Organizadora del Partido Fascista Mexicano:</p><p>Ignacio Flores (ebanista), Carlos Fernández (estudiante), Alfredo de la Cuadra (industrial petrolero),</p><p>Daniel Lozano F. (ferrocarrilero), Celso López Jr. (ferrocarrilero), Carlos A. Portilla (ferrocarrilero),</p><p>Lic. Benito Javier Pérez Verdía.- Doctor J. Nabor Islas (agricultor).- Ing. Gustavo Sáenz de Sicilia.-</p><p>Ing. Jesús Rabasa (industrial), Mario Bulnes (propietario).- J.P. Correa (filarmónico). A.B. Cuellar</p><p>(comerciante).- A. Bacha (comerciante).- Fernando H. Osorno (comisionista).- Archibaldo Guedea Jr.</p><p>(agricultor).- Reynaldo Díaz Jr. (estudiante).- Antonio Barrera (empleado).- Carlos Bacha (indus-</p><p>trial).- Luis Colombres de la Fuente (agricultor).- C. Martínez (electricista).- Mario Albarrán (maestro</p><p>mecánico). Manifiesto..., diciembre 1922.</p><p>165“Orden y justicia”: el Partido... Javier MacGregor Campuzano</p><p>Bibliografía</p><p>National Archives, Washington. Records of the Department of State Relating to</p><p>Internal Affairs of Mexico, 1910-1929. (NAW/Department of State/Rollo 92,</p><p>812.00. Fascist movement).</p><p>U.S. Military Intelligence Reports: Mexico, 1919-1941. Reel I, Political Affairs.</p><p>Diario de los Debates. Cámara de Diputados. Noviembre y diciembre de 1922, mayo</p><p>y octubre de 1923.</p><p>Current History. A Monthly Magazine of The New York Times. Vol. XVII, October</p><p>1922-March 1923, y Vol. XIX, October 1923-March 1924.</p><p>Glass Houses. Ten years of Free-Lancing.</p><p>N.Y., J.B. Lippincott Co.</p><p>A study of political parties and politics in</p><p>Mexico since 1890. PhD. in History,</p><p>University of Illinois.</p><p>La derecha radical en México, 1929-1949.</p><p>México, SepSetentas, No. 276.</p><p>Beals, Carleton.</p><p>1923 Mexico An Interpretation. New York. B.W.</p><p>Huebsch.</p><p>1938</p><p>Braderman, Eugene.</p><p>1938</p><p>Campbell, Hugh G.</p><p>1976</p><p>Hobsbawm, Eric (Dir.)</p><p>1983 Historia del Marxismo. 8. La época de la IIIa.</p><p>Internacional (II). Barcelona, Ed. Bruguera.</p><p>Hobsbawm, Eric.</p><p>1994 The Age of Extremes. A History of the World,</p><p>1914-1991. New York, Pantheon Books.</p><p>1994.</p><p>José V., Georgette.</p><p>1982 El relevo del caudillo. México, UIA-Ed. El</p><p>Caballito.</p><p>Meyer, Jean.</p><p>1979 El sinarquismo: ¿un fascismo mexicano?</p><p>1937-1947. México Ed. Joaquín Mortíz.</p><p>Signos Históricos166</p><p>Monzón, Luis G.</p><p>1924 Algunos puntos sobre el comunismo. Méxi-</p><p>co, Talleres Linotipográficos “Soria”.</p><p>Pérez Montfort, Ricardo.</p><p>1993</p><p>Taibo II, Paco I.</p><p>1986</p><p>“Por la Patria y por la Raza”. La derecha</p><p>secular en el sexenio de Lázaro Cárdenas.</p><p>México, UNAM.</p><p>Los Bolshevikis. Historia narrativa de los</p><p>orígenes del comunismo mexicano, 1919-</p><p>1925. México, Ed. Joaquín Mortiz.</p><p>Anexo</p><p>NAW/Department of State/Rollo 92 812 00. Fascist movement. “Agentes del movi-</p><p>miento fascista en los Estados Unidos y México”, s.l., s.f. Se reproduce literalmente.</p><p>-A-</p><p>Abasolo, Gto. Arnulfo Flores.</p><p>Acámbaro, Gto. Fidel Sánchez.</p><p>Acatlán, Pue. Miguel J. Tapia.</p><p>Acapulco, Gro. Benjamín Vargas.</p><p>Agua Prieta, Son. J.M.V. Ayala.</p><p>Aguascalientes, Ags. Esteban Herrera.</p><p>Aldama, Chih. Jesús L. Rivas.</p><p>Ameca, Ja. Adolfo J. Martínez.</p><p>Amenameca, Mex. V.M. Molina.</p><p>Angangueo, Mich. Pánfilo García.</p><p>Apam, Hgo. Ernesto Hernández.</p><p>Apasco, Gto. Juan Tapia Solís.</p><p>Isaias Lemus.</p><p>Apizaco, Tlax. J. de la Luz Suárez.</p><p>Atoyac, Jal. Teodulo Pérez Arroyo.</p><p>Atoyac, Ver. Hipólito Pérez.</p><p>167“Orden y justicia”: el Partido... Javier MacGregor Campuzano</p><p>Alamos, Son. Juan J. Ceballos.</p><p>Atlixco, Pue. Miguel Serrano.</p><p>Atizapan, Mex. Atilano Franco.</p><p>Arandas, Jal. Inocencio Cuellar.</p><p>Amer, Book and Printing Co.</p><p>Acoyoacan.</p><p>Acoyucan, Ver. J. Carpio.</p><p>Amatlán de los Reyes Cecilio H. Aguirre.</p><p>Altotonga, Ver. Gonzálo Mendez, Jr.</p><p>Amatepec. Diodoro Morales.</p><p>Amicilán, Pue. Roberto Herrero.</p><p>Arbol Grande, Tamps. Credencio Cruz.</p><p>Agente de Publicaciones</p><p>Ayutla, Gro. Juan B. García.</p><p>Allende, Coah. Arnulfo Conta.</p><p>Apetatitlán. G. Sánchez.</p><p>Allende, Coah. Mario Chapa</p><p>Agua Prieta, Son. J.M. Ayala.</p><p>Acaponeta, Nay. Eligio Arteaga.</p><p>-B-</p><p>Bakersfield, Cal. Sipes Bros.</p><p>Beristain, Pue. Epifanio Valderrabano.</p><p>Buenavista, Ciudad. Sonora News Co.</p><p>-C-</p><p>Cosamaloapam, Ver. F. Lucio y Díaz.</p><p>Coscomatepec, Ver. Bartolomé Canda.</p><p>Capulhuac</p><p>Cotija, Mich. Modesto Barragan.</p><p>Cuatro Ciénegas, Coah. Armando Alonso.</p><p>Cuyutlán, Coah.</p><p>Coatepec, Ver. Moreno, José B.</p><p>Contepec, Mich. V.A. Mondragón.</p><p>Signos Históricos168</p><p>Cuautitlán, Mex. Salvador Vallf.</p><p>Cuautla, Mor. Ma. Luisa Zermeño.</p><p>Cuicatlán, Oax. Ramón Rubiños.</p><p>Comitán, Chis. Reynaldo</p><p>Avendaño.</p><p>Culiacán, Sin. Eligio Abitia.</p><p>Cordoba, Ver. Sonora News Co.</p><p>Cartagena, Hgo. Fernando Godinez.</p><p>Coalcoman, Mich. Elías Alvarez.</p><p>Clacomulco, Jal.</p><p>C. Laredo, Tamps. F. Calderón.</p><p>C. González, Gto. Monico Rangel.</p><p>C. Manuel Doblado, Gto. Ma. Gpe. Villanueva.</p><p>C. del Maíz, S.L.P. Pedro P. Rivera.</p><p>C. Bravos, Gro. M. Pérez.</p><p>Campo Nuevo, Dgo. Cruz Guogosa.</p><p>Cantepec, Hgo. Carlos Guerrero.</p><p>C. de San Pedro.</p><p>Cruillas, Tamps. Florencio Villarreal.</p><p>Cuatotolapam, Ver. Rafael Maldonado.</p><p>Cuetzalan, Pue. C. Cruz.</p><p>Coxcatlán, Pue. 1.</p><p>Cananea, Son. Casimiro Nerac.</p><p>Campeche, Camp. Ramón Serna.</p><p>Curamano, Gto. José M. Canchola.</p><p>Cd. del Carmen, Camp.</p><p>Cadereyta, N.L. Eduardo Cantú.</p><p>Calpulalpan, Tlax. Aurelio Vazquez.</p><p>Calexico, Cal. José E. Rivas.</p><p>Campeche, Camp. Gabriel Cámara</p><p>Cárdenas, S.L.P. J. Belem Montoya.</p><p>Cedral, S.L.P. Donato Pimentel.</p><p>Celaya, Gto. Ignacio Velez.</p><p>Cerritos, S.L.P. Pedro Bautista.</p><p>C. Camargo, Chih. Jesús L. Rivas.</p><p>C. Valles, S.L.P. Donato Pimentel.</p><p>C. Jiménez, Chih. Jesús L. Rivas.</p><p>169“Orden y justicia”: el Partido... Javier MacGregor Campuzano</p><p>Ciudad Juárez, Chih. Jesús L. Rivas.</p><p>C. Victoria, Tamps. Valente L. Alvarez.</p><p>C. Guzmán, Jal. Rafael V. González.</p><p>Colima, Col. Pablo Montaño.</p><p>Comonfort, Gto. Concepción Manríquez.</p><p>Contreras, D.F. Carlos Veterano.</p><p>Córdoba, Ver. Elisa M. Castillo.</p><p>Cortázar, Gto. Wenceslao Flores.</p><p>Chacaltianguis, Ver. Pablo Reyes.</p><p>Chalco, Mex. Andrés Granados.</p><p>Chalchicomula, Pue. Luis M. Bravo.</p><p>Chiatempan, Tlax. Luis Morales.</p><p>Chicago, Ill. P.O. News Co.</p><p>Chihuahua, Chih. Jesús L. Rivas.</p><p>Chignahuapan, Pue. Ma. G. Cortés.</p><p>Chietla, Pue. Abraham García.</p><p>Chilapa, Gro. Mariano Jiménez.</p><p>Chilpancingo, Gro. Fernando Barrera.</p><p>Chinameca, Ver.</p><p>Chalchihuites, Zac. Jesús Ibarra Ríos.</p><p>Chicago, Ill. Raibow News.</p><p>-D-</p><p>Dolores Hgo., Gto. Demetrio Alvarez.</p><p>Douglas, Ariz. B. Arevalo.</p><p>Durango, Dgo. Andrade Hermanos.</p><p>Dallas, Tex. Abel Martínez.</p><p>Denver, Cal. Juan G. Ríos.</p><p>Dos Rios, Mex. Joaquín Labastich.</p><p>Detroit, Mich. G. Galdos.</p><p>-E-</p><p>El Fuerte, Sin. Leonardo Alvarez.</p><p>El Naranjal, Ver. Raf. Vergara.</p><p>Signos Históricos170</p><p>El Oro, Mex. Andrés Serrano.</p><p>El Potrero, Ver. A. Ruiz Torres.</p><p>El Seco, Est. Rinconada, Pue. Luis, G. Fernández.</p><p>El Salto, Jal. Mecedonio González.</p><p>Est. Analco, Pue. Aurelio Suárez.</p><p>Est. Mexia, Oax. Carlo Roque.</p><p>Est. Ixtlahuaca, Mex. Gustavo A. Vega.</p><p>Est. Ortiz, Chih. Jesús L. Rivas.</p><p>Esperanza, Pue. Alfredo Limón.</p><p>Escuintla, Chis. Teófilo Toledo.</p><p>Empalme de González. Eleuterio González.</p><p>Ejutla, Oax. H. Corbadillo.</p><p>Encarnación Ortiz, Gto. A. C. Ortega.</p><p>Empalme, Son. Ramón Matus</p><p>Est. Osorio. A. Dosal.</p><p>Est. Rebiceñas. E. S. y López.</p><p>Est. Ahorcado. E. Perruquia.</p><p>Est. El Huaje. Amado Ortega.</p><p>-F-</p><p>Fresnillo, Zac. Federico Arellano.</p><p>Fortín, Ver. Julio F. Muñoz.</p><p>Frontera, Tab. Felipe Camelo.</p><p>-G-</p><p>Gutiérrez Zamora, Ver. Fernando García.</p><p>Guadalajara, Jal. Felipe de J. Velasco.</p><p>Guanajuato, Gto. O. Navarrete Novoa.</p><p>Guadalupe, Zac. Oscar H. Leon.</p><p>Guaymas, Son. José Ma. Escobar.</p><p>Guamuchil, Sin. Jesús Rodríguez.</p><p>Guatemala “Ilustrado”. Mario Alb. M. V.</p><p>Gral. Cepeda, Coah. José González H.</p><p>Guatemala. Ayestas y Cia.</p><p>171“Orden y justicia”: el Partido... Javier MacGregor Campuzano</p><p>-H-</p><p>Habana, Cuba. J.J. Higuera Cerros.</p><p>Hermosillo, Son. Meza y Maldonado.</p><p>Hgo. del Parral, Chih. Jesús L. Rivas.</p><p>Houston, Tex. Baldomero Solorzano.</p><p>Huamantla, Tlax. Agustín Espejel.</p><p>Huatusco, Ver. Vicente Huber.</p><p>Huachinango, Pue. Sandalio Mejía.</p><p>Huehuetoca, Mex. Castulo de Labastida.</p><p>Huichapan, Hgo. Vicente de P. Herrera.</p><p>Huistla, Chis. F. Coutiño.</p><p>Huetamo, Mich. Emilio M. Carvajal.</p><p>Huatabampo, Son. F. R. Ibarra.</p><p>Huahutla de Jimenez, Oax. Perfecto García.</p><p>Huitzo, Oax. Jesús Arvea.</p><p>Huajuapan de León, Oax. Tomás Espinosa.</p><p>-I-</p><p>Iguala, Gro. Jesús Ma. Velasquez.</p><p>Irapuato, Gto. Alfonso Rojas.</p><p>Ixmiquilpan, Hgo. Carolina Arciniega.</p><p>Ixtlan, Nay. Dionisio García.</p><p>Izúcar de Matamoros, Pue. Cirino F. Hernández.</p><p>Ixtlahuaca, Mex. A. Vega.</p><p>Igmay, Jal. Luis Ochoa.</p><p>Ixtlán de J. Pax. Camilo Hernández.</p><p>-J-</p><p>Jalapa, Ver. E. Martínez Castillo.</p><p>Jalapa, Ver. Ana Díaz.</p><p>Jalalpa, Mex. Emiliano Cuevas.</p><p>Jaltilpan, Ver. Cirilo Santos.</p><p>Signos Históricos172</p><p>Jilotepec, Mex. Soledad Aguilar.</p><p>Jerez, Zac. Evaristo Muñoz.</p><p>Jojutla, Mor. Susano Martínez.</p><p>Jiquilpan, Mich. L. Marín.</p><p>Jolliet, Ill. Joel Ramírez.</p><p>Jaral del Valle, Gto. Ramón Ruiz Rivera.</p><p>Juchigan, Oax. Manuel Martínez Escobar.</p><p>Jeronio, Ariz. B. Pacheco.</p><p>Jerez, Zac. A. Aguirre.</p><p>-L-</p><p>Los Mochis, Sin. Procopio Zamudio.</p><p>La Barca, Jal. José Hernández.</p><p>La Misa, Son. S. Luttero-th.</p><p>Lowell, Ariz. Juan Barragán.</p><p>La Piedad, Mich. Gregorio Marquez.</p><p>Lagos de Moreno, Jal. José Sierra.</p><p>Laredo, Tex. Erasmo Dominguez.</p><p>León, Gto. Pascual Gutiérrez.</p><p>Linares, N. L. Jesús Mares Garza.</p><p>Los Angeles, Cal. Sucs. de R. L. de Lara.</p><p>La Colmena, Mex. A. Godinez.</p><p>La Capilla, Jal. Ramón Munguía.</p><p>Las Vigas, Ver. Guadalupe Ramírez.</p><p>Libres, Pue. Pedro López Valera.</p><p>Los Reyes, Mex. Silvanio Buendía.</p><p>La Paz, B. C. Eutopia Verdugo.</p><p>Long Beach. L. B. News Co.</p><p>-M-</p><p>Manzanillo, Col. Eulogio Lazareno.</p><p>Mapimi, Dgo. León Rodríguez.</p><p>Matehuala, S.L.P. Manuel J. Torres.</p><p>173“Orden y justicia”: el Partido... Javier MacGregor Campuzano</p><p>Matehuala, S.L.P. José Delgado.</p><p>Maravatio, Mich. Inocencio Cruz.</p><p>Martínez de la Torre, Ver. Antonio Landa.</p><p>Mazatlán, Sin. Fernando J. Carrillo.</p><p>Medellin, Ver. A. Rodríguez.</p><p>Merida, Yuc. Emilio Rodrigo.</p><p>Metepec, Pue. Amado L. Mendoza.</p><p>Minatitlán, Ver. Gabriel Bremont.</p><p>Misantla, Ver. Feliciano Salamanca.</p><p>Monclova, Coah. Teodoro Ma. González.</p><p>Monterrey, N. L. Jesús M. Ríos.</p><p>Monterrey, N. L. Fco. Rodríguez y Cía.</p><p>Morelia, Mich. José Juri.</p><p>Magdalena, Son. Victoria R. Chavarin.</p><p>Nocorito, Sin. Ignacio Gaxiola.</p><p>Mexico City Banking.</p><p>Montemorelos, N. L. Reynaldo Gutiérrez.</p><p>Matamoros, Tamps. C. Knosel.</p><p>Mixquihuala, Hgo. J. de la Peña.</p><p>Maltrata, Ver. Jaime D.</p><p>Mexicali, B. C. Toribio García.</p><p>Mixquihuala.</p><p>Mazapil, Zac. José B. Montejano.</p><p>Manzanillo, Col. Timoteo Chávez.</p><p>Miami, Ariz. G. Morales.</p><p>Mochis. P. A. Zamudio.</p><p>-N-</p><p>Navajoa, Son. Daniel Sañudo.</p><p>New Orleans. Geo Wallace.</p><p>New York. Jaime, V. Lagos</p><p>Nogales, Son. N. B. Treviño.</p><p>Nogales, Son. Victor Bonilla.</p><p>Nogales, Son. Ricardo Molina.</p><p>Signos Históricos174</p><p>Necaxa, Pue. E. Valderrabano.</p><p>Nuevo Laredo, Tamps. Federico Calderon.</p><p>Naranjal, Ver. E. S. Jurado.</p><p>Nochistlán, Zac. Alberto Ruiz.</p><p>Novolato, Sin. Eduardo López M.</p><p>Nopala, Hgo. Heriberto Uribe.</p><p>Nochiustlán, Oax. R. Cervantes.</p><p>Nopalapam de Zaragoza. An. Rojas.</p><p>Neolinco, Ver. Rafael Jiménez.</p><p>Nochistlán, Zac. Luis Contreras.</p><p>Nogales, Son. Sonora, News Co.</p><p>Nauzontla. Pedro Jiménez.</p><p>Nogales, Ariz. E. Villapadierna.</p><p>-O-</p><p>Oaxaca, Oax. Rafael Cuevas.</p><p>Ocotlán, Jal. Rafael Ramírez.</p><p>Ocozocuautla, Chis. Feliciano Esperanza.</p><p>Ocozocuautla, Chis. Eduardo Camacho.</p><p>Orizaba, Ver. Ricardo Molina.</p><p>Oriental, Pue. P. Rueda.</p><p>Otatitlan, Pue. Fernando Barrera.</p><p>Otumba, Mex. Rosendo González.</p><p>Ozuluama, Ver. Alfonso Moxica.</p><p>Ozumba, Mex. Agustin Bautista.</p><p>Ocayacac, Mex. Agustin Avilés.</p><p>Omaha, Neb. B. Serrano.</p><p>Ocampo, Mich. G. P. Mirlos.</p><p>Ojo Caliente, Zac. Roberto Revilla.</p><p>-P-</p><p>Pachuca, Hgo. C. P. Vda. de Zanolini.</p><p>Palau, Coah. Rodolfo Rocha.</p><p>175“Orden y justicia”: el Partido... Javier MacGregor Campuzano</p><p>Paraíso, Novillero, Ver. Leonardo Zamorategui.</p><p>Pánuco, Ver. Benito Lozano.</p><p>Parras de la Fuente. Guillermo Laredo.</p><p>Paso de Mayo, Ver. Tomás Huerta.</p><p>Patzcuaro, Mich. Ricardo Avila.</p><p>Pénjamo, Gto. Teofilo Mingula.</p><p>Perote, Ver. Antonio E. Mendez.</p><p>Piedras Negras, Coah. Gregorio T. Cabral.</p><p>Pinotepa Nacional, Oax. Claudio M. Pérez.</p><p>Puebla, Pue. Antonio Maza.</p><p>Puerto México, Ver. Rosalino Palma.</p><p>Phoenix, Ariz. Manuel Porras.</p><p>Progreso, Yuc. Antonio Moncada.</p><p>Poncitlán, Jal. Manuel C. Gonzalez.</p><p>Puruandiro, Mich. A. Cervantes.</p><p>Pueblo Colorado. Anastasio Laris.</p><p>Putla, Oax. A. Arellano.</p><p>Puerto Lobos, Ver. N. Cuevas.</p><p>Papantla, Ver. José Ma. León.</p><p>Palpan, Mor. R. M. Toledano.</p><p>Pahuatla, Pue. Salomón González.</p><p>Pediceña, Dgo. Encarnación Lopez.</p><p>Playa Vicente, Ver. José Ruiz.</p><p>Pedro Escobedo, Qro. E. Perusquia.</p><p>Paraíso, Tab. Tone V.</p><p>Purga. J. Pérez Cobo.</p><p>Piedras Negras, Ver. Luis Castillo.</p><p>Querétaro, Qro. Meliton Castillo.</p><p>-R-</p><p>Reynosa,</p><p>Tamps. Manuel E. Velasco.</p><p>Rincón Antonio, Oax. Sonora News Co.</p><p>Río Blanco, Ver. Ricardo Molina.</p><p>Río Grandes, Zac. José A. Jiménez.</p><p>Signos Históricos176</p><p>Río Verde, S.L.P. Abelardo Duque.</p><p>Rincón de Ramos, Ags. Castorena Isidro R.</p><p>Rincón, Gto. José Ma. Chavira.</p><p>Rayón, Coah. Lisandro M. Bravo.</p><p>Ramos Arizpe, Coah. Zaragoza Cantú Reyna.</p><p>Rosita, Coah. C. González Estrada.</p><p>Rosano, Sin. Fco. L. de Otañez.</p><p>-S-</p><p>Sabinas, Coah. Ismael Z. Rodríguez.</p><p>San Juan Sabinas, Coah. Anto. Rabago.</p><p>San Lorenzo, Ver. A. Ruiz Torres.</p><p>Salamanca, Gto. Ramón Cendejas.</p><p>Salina Cruz, Oax. J. M. Polanco.</p><p>Saltillo, Coah. Alberto Flores.</p><p>Salvatierra, Gto. J. Melquiades Romero.</p><p>Silao, Gto. Ricardo Leceago.</p><p>Soledad, Ver. Marciano Córdoba.</p><p>San Andrés Tutla, Ver. Angel C. Bustamante.</p><p>San Antonio, Tex. Carlos Estrada.</p><p>Sonora News Co.</p><p>Sayula, Jal. F. Munguia.</p><p>San Blas, Sin. Pablo Aguirre.</p><p>San Buenaventura, Coah. Jesús Flores.</p><p>San Diego, Cal. M. R. Domínguez.</p><p>San Felipe, Gto. Monico Rangel.</p><p>San Fco., Cal. Vicente R. Pimentel.</p><p>San Fco., Cal. Mexican Commercial Co.</p><p>San Fco., Cal. C. A. Miller.</p><p>San Francisco del Rincón, Gto.</p><p>San Jerónimo, Oax. Francisco Cortés.</p><p>San Juan del Río, Qro. Rafael Martínez.</p><p>San Juan Teotihuacán. Vicente Gonzalez.</p><p>San Fco. de las Peñas, Ver. Rutilio Campos.</p><p>S. Luis de la Paz, Gto. José Calzada.</p><p>177“Orden y justicia”: el Partido... Javier MacGregor Campuzano</p><p>S. L. P. Eduardo Torres Zuñiga.</p><p>San Marcos, Pue. E. Vera Meza.</p><p>San Miguel Allende, Gto. Pablo Alvarez.</p><p>San Pedro, Coah. Refugio Cruz.</p><p>S. Ana, Tlax. José Ma. Lemus.</p><p>Santa Barbara, Chih. Octaviano Padilla.</p><p>S. Lucrecia, Ver. Perfecto P. Ortiz.</p><p>S. Lucrecia, Ver. Sonora News Co.</p><p>Santa Rosa, Ver. Ricardo Molina.</p><p>Santiago Ixcuintla, Nay. Carlos J. Rodríguez.</p><p>San Antonio Nanshuatipac,Oax. Longino Luna.</p><p>Santa Catarina, N. L. Antonio S. Martínez.</p><p>Santa Clara, Ecatepec. Aurelio Maya.</p><p>Sombrerete, Zac. Juan F. Saucedo.</p><p>Santa Ana, Cal. Lucero y González.</p><p>So Omacha, Neb. B. Serrano.</p><p>San Pablo Huitzo. Simón Quintero.</p><p>San Luis Acatlán, Gro. M. Solis.</p><p>San Juan Evangelista. Carlos Malpica M.</p><p>Sabinas, Hgo, N. L. Blas Garza.</p><p>San Cristobal Las Casas. Isamo Rossette.</p><p>San Felipe del Progreso. Juan Carpio.</p><p>Santa Ana, Tlax. Luis Morales I.</p><p>San Fransisco.</p><p>San Lorenzo, Ver.</p><p>San Pedro Sula, Hond. Alejandro Delgado.</p><p>Santiago Papasquiaro, Dgo. J. M. Mier.</p><p>San Blas, Nay. A. Reynaud.</p><p>-T-</p><p>Tlaxcoapm, Hgo. Juan de la Peña.</p><p>Tanhuato, Mich. Everardo Zepeda.</p><p>Tenango de Doña, Hgo. Felipe Franco.</p><p>Tacambaro, Mich. Macario M. Torres.</p><p>Signos Históricos178</p><p>Tampico, Tamps. Gabriel Gi.</p><p>Tampico, Tamps. Sonora News Co.</p><p>Tancanhuitz, S. L. P. José B. Lira.</p><p>Tapachula, Chis. Francisco Ramos.</p><p>Tehuacán, Pue. Rafael Sánchez.</p><p>Tehuantepec, Oax. Aurelio C. Orozco.</p><p>Tenango, Mex. Ramón Reyes.</p><p>Teocalco, Hgo. E. G. Marin.</p><p>Teocelo, Ver. Rod. A. Blazquez.</p><p>Teotitlán del Camino. Luis Bravo.</p><p>Tepeji del Rio, Hgo. Herminio Garcini.</p><p>Tepic, Nay. Julio R. Bertrand.</p><p>Tequisquiapan, Qro. Fausto Pardo.</p><p>Texcoco, Mex. Martín Nava Galán.</p><p>Texmelucan, Pue. Atalo Muños.</p><p>Teziutlán, Pue. J. Gonzalez Aguirre.</p><p>Tezontepec, Oax. Faustin Luna.</p><p>Tierra Blanca, Ver. Sonora News Co.</p><p>Tierra Blanca, Ver. J. M. Espinosa.</p><p>Tia Juana, B. C. Demetrio F. Sotomayor.</p><p>Tizacuyan, Hgo. Eloan Galindo.</p><p>Tesoatlán, Oax. Fernando Salazar.</p><p>Tlancualtipan, Pue. Luis Spindda.</p><p>Tamasopo.</p><p>Tezontepec, Hgo. Faustino Luna.</p><p>Tlaxiaco, Oax.</p><p>Tecalitlán, Jal. J. Felix Torres.</p><p>Tlaxcala, Tlax. José Ma. Lemus.</p><p>Tipaco, Pue. Pedro A. Flores.</p><p>Teapa, Tab. Lorenzo Beltrán.</p><p>Taeluato, H. Everardo Zepeda.</p><p>Tenango del Aire. Gabriel Molina.</p><p>Tecalitlán, Jal. J. F. Torres.</p><p>Tepeyahualco, Pue. R. Barrientos.</p><p>Teloloapan, Gro. Carlos Roldán.</p><p>Tenoxique, Tab. Tomás C. Ramírez.</p><p>179“Orden y justicia”: el Partido... Javier MacGregor Campuzano</p><p>Tlacotalpan, Ver. Abelino Bolaños.</p><p>Tlajomulco, Jal. Marciano Badillo.</p><p>Tlahualilo, Dgo. E. Valenzuela.</p><p>Tlapacoyan, Ver. Everardo Pérez.</p><p>Tlalnepantla, Mex. Eleuterio Saucedo.</p><p>Tlalpujahua, Mich. Concepción jiménez.</p><p>Tlatlauqui, Pue. Enriqueta Pineda.</p><p>Toluca, Mex. Manuel Juárez.</p><p>Tlaxiaco, Oax. José Encarnació Mejía.</p><p>Tonalá, Chis. A. R. Huerta.</p><p>Torreón, Coah. Francisco Rodríguez.</p><p>Tucsón, Ariz. Andrés E. Davila.</p><p>Tula, Hgo. Jesús Reyes.</p><p>Tulancingo, Hgo. R. del Villar y V.</p><p>Tuxpam, Ver. M. Deschamps.</p><p>Tuxtepec, Oax. Sotero A. Castillo.</p><p>Tuxtla Gutiérrez. M. Gamboa.</p><p>Tototlan, Jal. I. Castillo.</p><p>Tepeaca, Pue. F. Ciro Juárez.</p><p>Tlaxco, Tlax. José Islas Calderón.</p><p>Tepeji del Río. Herminio Garcini.</p><p>Temaxvaltepec, Mex. José Ma. Arellano.</p><p>Teapa, Tab. L. Beltran.</p><p>Tlahuanalca, Mex. J. M. Loyola.</p><p>Tepanco, Pue. Pedro A. Flores.</p><p>Tlacotepec, Huatusco, Ver. Francisco Colorado.</p><p>-U-</p><p>Uruapam, Mich. Jesús Magaña.</p><p>Uriangato, Gto. M. Fajardo.</p><p>-V-</p><p>Valle de Santiago, Gto. Teodoro R. García.</p><p>Velardeña, Dgo. Librado M. Avila.</p><p>Signos Históricos180</p><p>Veracruz, Ver. Arturo G. Múgica.</p><p>Viesca, Coah. Manuel Tiscareño.</p><p>Villa Acuña, Coah. Amalia Espinosa.</p><p>Villa Aldama, N. L. Videncio González.</p><p>Villa de Libres, Pue. Baldomero López.</p><p>Villa Guerrero, S. L. P. Angel O. Barra.</p><p>Villa Hidalgo, Mich. F. Romero López.</p><p>Villahermosa, Tab. Julio Camelo.</p><p>Villa Nicolás Romero, Mex. Carlos Jasso.</p><p>Valle de Bravo, Mex. S. Barcenas.</p><p>Villa Unión. Enrique López.</p><p>Valles, S. L. P. Donato Pimentel.</p><p>-X-</p><p>Xochiapulco, Pue. Modesto Dinorin.</p><p>Xicotencatl. Aurelio L. Martínez.</p><p>-Y-</p><p>Yerécuaro, Mich. J. C. Anaya.</p><p>Yuma, Ariz. Aurelio L. Martínez.</p><p>Yuriria, Gto. Marcelino Nuñez.</p><p>-Z-</p><p>Zacapu, Mich. E. Alvarez y Hnos.</p><p>Zacapaxtla, Pue. Roberto Salazar.</p><p>Zacatecas, Zac. Inocencio Saucedo.</p><p>Zacatlán, Pue. Ma. Hernández.</p><p>Zitácuaro, Mich. Manuel Vaca.</p><p>Zimapan, Hgo. J. A. García.</p><p>Zacualpan, Mor. Cristeto F. García.</p><p>Zinacatepec, Tehuaca, Pue. Secundino García.</p><p>NOTAS</p>
- Kant immanuel _ Critica del juicio
- El Monumento a la Revolución y el Patrimonio Cultural en un siglo de transformaciones
- LAS ARTES PLASTICAS DEL SEGUNDO RENACIMIENTO EN ARAGÓN
- El Espíritu del Tren Maya
- EL COLONIALISMO Y LA DOCTRINA DE LA PROPIEDAD DE LOCKE
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- zurita
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